Nuestras escuelas han quedado vacías desde el
23 de marzo y se han mudado a nuestras casas y toma importancia un nuevo habitante
que acompañará a los estudiantes durante un buen tiempo, hablo de un dispositivo
(computadora, tableta, IPad o teléfono celular); Un nuevo integrante que la
mayoría no sabe manejar y muchos ni conocen, ¿Será una nueva relación entre
Maestro – Dispositivo - Estudiante?
Como una protección hacia estudiantes, docentes
y la población en general, el gobierno de México, a través de la Secretaría de
Educación Pública (SEP), determinó suspender las clases presenciales. Es una
situación extraordinaria que nos muestra distintas realidades vinculadas con la
desigualdad y nos plantea grandes desafíos, pero también nos ofrece
oportunidades para actuar de manera conjunta y participativa. Así, vemos a
maestras y maestros acompañando y apoyando al alumnado ante las dificultades,
profesionales que continúan educando, y también a madres y padres que ponen el
hombro para colaborar con este esfuerzo.
Quienes trabajamos o participamos en el sector
educativo: autoridades, maestros, estudiantes, madres y padres de familia. En
este contexto, la SEP puso en marcha la iniciativa Aprende en casa y, más
recientemente, ha desarrollado la Estrategia de Educación a Distancia:
transformación e innovación para México, que ofrece múltiples herramientas
dirigidas a diferentes figuras educativas, madres y padres de familia y
estudiantes. Esta estrategia, sin precedente en la educación en línea en
nuestro país, se desarrolla en coordinación con las autoridades educativas de
las entidades federativas y las que operan a nivel local, como parte de un gran
esfuerzo nacional para enfrentar la coyuntura actual.
Es darnos cuenta que las estrategias de la SEP no
podrán enfrentar la coyuntura en la cual solo muestra que la mayoría de los
estudiantes carecen de dispositivos, señales de internet y desde luego la
ignorancia o desconocimiento de maestros y padres de familia para el acceso a alguna plataforma.
La educación en línea en nuestro país no
existe, no funciona, no es didáctica y no es una manera de solucionar realmente
un nuevo aprendizaje en la educación.
Este nuevo habitante (dispositivo)
realmente es un desconocido para los integrantes de la familia.
LARA MARÍA
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Hola Lara María, muy interesante lo que escribes, me llamó la atención casi el último párrafo, donde comentas que la educación en línea en nuestro país no existe... y pensé ¿Qué pasaría si a ese párrafo le cambiamos "educación en línea" por "educación por competencias", por ejemplo?, seguiría teniendo sentido. A lo que quiero llegar es que la propia educación presencial no termina por asentar, no está siendo didáctica, no terminamos por acomodarnos a ella... ante ese panorama ¿qué puede esperarse de la educación en línea improvisada?, creo que el camino de mejora está en generar el posicionamiento del docente como un intelectual, es decir que los docentes tenemos que leer, reflexionar, cuestionar, discutir como un ejercicio obligado. Pero por ahora mayoritariamente somos docentes que obedecemos instrucciones, si mañana nos proponen adoptar un nuevo enfoque y nos presentan nuevos formatos de planeación, difícilmente cuestionaremos con profundidad o generaremos debates entre nosotros... lo adoptaremos.
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